Cada célula de mi cuerpo es Cuba
María Werlau nació el 15 de agosto de 1959 en La Habana. Su padre participó en las luchas contra la dictadura del general Fulgencio Batista y posteriormente se refugió en Estados Unidos, donde se casó en 1958 con quien sería la madra de María. Después de la victoria de la Revolución cubana, los padres de María volvieron inmediatamente a Cuba y su padre empezó a trabajar en el Instituto de Azúcar. La familia, decepcionada por el rumbo de la Revolución, empezó a conspirar contra Fidel Castro, pero terminó exiliándose a Estados Unidos, desde donde el padre de María continúo con la conspiración. Fue entrenado para participar en la invasión de la bahía de Cochinos. Esta falló y el padre de María, aunque se escondió algunos días, fue capturado y asesinado por unos milicianos cubanos. La familia se trasladó a Puerto Rico y posteriormente María se fue a estudiar a la Universidad de Georgetown. Durante varios años trabajó en el sector financiero en Venezuela y en Chile. Regresó a Estados Unidos en 1993 y empezó a formar parte de los movimientos y las organizaciones que luchaban contra las violaciones de los derechos humanos en Cuba. Ha participado y dirigido varios proyectos, entre los cuales destacan el Archivo Cuba y el Memorial Cubano; asimismo, colaborado con personajes importantes del exilio cubano, como Ricardo Bofill, Armando Lagos y Elena Mederos.