Aracely Rodríguez San Román (Guerra)

* 1940

  • “Imagínese, en [la prisión de] Guanabacoa, sacaron las presas comunes y nos metieron a nosotros, quiere decir que no se podía allí uno ni acostar en una cama, porque todo estaba muy sucio. Tuvimos que primero limpiar y fue algo terrible. Pero bueno, allí estuvimos. Y de allí nos llevaron a una granja que se llamaba América Libre. Allí estuvimos años… Fue como del 67’ al 73’, que estuvimos allí. Y de allí nos llevaron a otra que se llamaba Nuevo Amanecer, que estuvimos del 73’... Bueno, y de allí ya empezaron a soltar… Soltaron muchas presas, y yo me quedé hasta el final, salí en el año 79’. Ya allí, dentro de la prisión, a mí ya me arreglaron todos los papeles para venir para acá [a los Estados Unidos]. Porque habían hecho un tratado, el gobierno de Cuba y el de Estados Unidos, no sé cómo fue, pero nos sacaron a todos los presos políticos, nos sacaron de Cuba, y nos trajeron para acá.”

  • “El 13 de mayo de 1964 entró Gilberto Rodríguez San Román, otro hermano que se había entrenado aquí [en los Estados Unidos por la CIA], entró a Cuba. El 16 de mayo fue descubierto por las milicias de Fidel Castro y fue asesinado. El 20 de mayo… El 16 de mayo fue cuando él fue descubierto y lo mataron. El 20 de mayo, yo estaba en mi casa, porque yo era secretaria y tesorera de la organización [Frente Unido Occidental], y yo me movía siempre con mi tío que era el jefe de la organización, pero en este momento yo estaba en mi casa, y nos llegó la noticia de que habían matado a mi hermano. Entonces nos quedamos en espera de ver qué pasa. Porque estaba mi tío, estaba mi otro hermano, y ellos tenían que estar escondidos porque ellos se habían ido de aquí. Entonces descubrieron a mi tío. Alguien que cogieron parece que dijo dónde estaba mi tío y lo descubrieron. Y mi tío, cuando lo fueron a coger, le dio candela a todos los papeles que él tenía, y le dio candela a la casa donde él estaba, y se dio un tiro. De hecho, que yo estoy hablando con ustedes ahora aquí es porque yo no estaba con él, porque él siempre me decía que, si nos iban a cogernos, el primer tiro me lo daba a mí y después se lo daba a él, porque él no quería que yo cayera presa, porque decía que iba a pasar muchísimo en la prisión, como así fue lógicamente. Pero no estaba yo allí...”

  • “[En] Guanajay ya como estaba yo en mi mundo, porque eran unas personas que afinaban conmigo como personas, como ser humano, afinaban conmigo, porque eran personas como yo, pues enseguida uno hace amistad, se siente uno mejor allí. Lo que pasaba allí, si era una cosa mala, la sufríamos todos, y si era una alegría, nos alegrábamos todos. Una cosa mala es que llegaba por ejemplo una persona de su juicio, y decía: ‘me condenaron a muerte a mi esposo’. Y ya sabe que al otro día ya estaba muerto. Eso era un dolor de todas nosotras. Salía al juicio y venía y decía: ‘me condenaron a muerte a mi papá’. Como sucedió con una muchachita de Isla de Pinos, Irmita Fernández Llorca, que tenía 17 años cuando la cogieron presa. La llevaron a juicio y cuando regresó del juicio dijo: ‘condenaron a muerte a mi papá’. Y ya se sabía que, si lo condenaron a muerte, ya era un hombre muerto. Y aquello era un dolor de todas. Así fueron muchas, muchas mujeres, que salieron a juicio y cuando regresaron, venían con la mala noticia de que tenían… Muchas veces no era familia, era simplemente una amistad, pero es una cosa que uno sufre, porque es una persona que matan miserablemente, por... Es que no sé, ni como calificar la manera con que ellos trataban a esas personas, como ellos podían ser tan malos, tan diabólicos, que no tenían compasión con nadie. No importa si era una persona mayor, si era una persona joven, si era un niño. Ellos llegaron a matar niños, muchachos… Ellos mataron al hermano de una compañera de nosotros, que era inclusive un muchacho anormal, no era normal, y era menor de edad, y lo fusilaron. Fueron muchas, muchos horrores, lo que se pasaron en la prisión. Porque allí todas éramos hermanas. Allí, el dolor de una era el dolor de todas. Y fueron muchas las cosas que se pasaron durante todos esos años en la prisión. Ya cuando pasaron los primeros años, ya pasó toda esa parte mala, ya no caían tantas personas presas, porque al principio fue en masas, cogían a personas en cantidades, fusilaban en cantidades y condenaban en cantidades. Pero ya después pasó un tiempo, digamos años, que ya a nosotros nos llevaron a granjas y eso… Pues no llegaban esas noticias de fusilados y eso, porque ya estábamos condenados todo el mundo, los hombres en prisión, fueron miles y miles y miles de hombres en prisión, a los que llevaron a Isla de Pinos, allí les pusieron trabajos forzados, allí mataban en trabajos forzados. Allí pasó mucho. En Cuba ha pasado tanto, que yo creo que nunca, nunca, nunca, la historia de Cuba va a ser escrita. Nunca se va a saber todas las cosas que el pueblo de Cuba pasó, nunca…, y que los presos políticos pasamos, eso nunca se va a saber.”

  • “Mi papá era un hombre bastante preparado. Siendo un campesino… Bueno, realmente él no nació en el campo como mi mamá. Él cuando se casó con mi mamá, se fue al campo. De hecho, él no sabía trabajar el campo. Y mi papá habló con los vecinos, que en aquel momento allí no había escuela ni nada, los vecinos no sabían leer ni escribir. Y él les dijo: ‘yo por las noches les doy clases para que aprendan a leer y a escribir y ustedes me enseñan a trabajar la tierra’. Y así mi papá aprendió a trabajar la tierra. Pero mi papá era un hombre que había leído mucho y tenía bastante inteligencia. Y yo recuerdo que mi papá, cuando triunfó la revolución, nos dijo: 'Lo que había, no podía seguir, porque realmente el gobierno había incurrido en muchos errores. Pero esto que viene, va a acabar con este pueblo.' No se me olvida… Lo que había, no podía seguir, pero lo que viene, va a acabar con este pueblo. Y acabó con él. Quiere decir que mi papá se había dado cuenta que ese gobierno no iba a ser bueno para Cuba. Y así fue. No fue bueno para Cuba, y casi sesenta años después, cincuenta y pico largos, ese gobierno permanece allí. Ya no está mi papá, ya no están cuántos miles y miles de cubanos han quedado aquí en la diáspora [de los Estados Unidos]. Que no van a poder ver a Cuba libre, como a lo mejor no la veo yo tampoco. Que es lo que yo quisiera. Yo quisiera poder regresar a mi país, aunque sea para decir: ‘pisé de nuevo la tierra donde nací’. Cuánto yo quisiera regresar a Cuba y no sé si voy a poder regresar. Yo no sé si voy a poder regresar, porque los años son muchos y las esperanzas no son muchas, porque ¿qué están haciendo los gobiernos?”

  • “Y siguen allí [el gobierno comunista cubano]… Se murió Fidel [Castro], salió el otro [su hermano Raúl Castro], allí ya hoy o mañana, qué sé yo, le va a dejar la jefatura para dársela a otro, al sucesor, pero nadie ha hecho nada por resolver este problema. Dios quiera que salga alguien que sí lo haga. Quién sabe ahora, quien sabe ahora, quién sabe ahora si sí puede pasar algo. Yo lo espero. Dios quiera, Dios quiera...”

  • Celé nahrávky
  • 1

    Miami, Florida, USA, 18.07.2018

    (audio)
    délka: 01:40:04
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La historia de Cuba nunca va a ser escrita

Aracely Rodríguez San Román durante la grabación en Miami, 2018
Aracely Rodríguez San Román durante la grabación en Miami, 2018
zdroj: archivo de Post Bellum

Aracely Rodríguez San Román nació el 24 de marzo de 1940 en Paso Real de San Diego en Cuba. Justo después del triunfo de la Revolución Cubana en 1959, sus hermanos y su tío se alzaron a la montaña de Pinar del Río para organizar actividades de resistencia anticastrista. Uno de sus tíos (Esteban Márquez Novo) se escapó a los Estados Unidos de América, donde recibió entrenamiento en espionaje por parte de la CIA, y cuando volvió en 1962 a Cuba, la familia de Aracely fundó la organización de resistencia llamada Frente Unido Occidental. En mayo 1964 fue detenido y asesinado el hermano de Aracely, Gilberto, el tío de Aracely se suicidó antes de ser capturado por la milicia del régimen de Fidel Castro, y Aracely junto con su otro tío y el resto de sus hermanos, fue detenida. Entre los años 1964 - 1967 pasó por las prisiones de Pinar del Río, Guanajay y Guanabacoa, entre 1967 - 1973 fue presa en la granja América Libre y entre 1973 - 1979 en la granja Nuevo Amanecer. Fue liberada de la prisión en 1979 a base de un acuerdo entre Cuba y los Estados Unidos sobre la liberación de los presos políticos. Actualmente reside en los Estados Unidos y a Cuba no ha vuelto desde 1979.