Následující text není historickou studií. Jedná se o převyprávění pamětníkových životních osudů na základě jeho vzpomínek zaznamenaných v rozhovoru. Vyprávění zpracovali externí spolupracovníci Paměti národa. V některých případech jsou při zpracování medailonu využity materiály zpřístupněné Archivem bezpečnostních složek (ABS), Státními okresními archivy (SOA), Národním archivem (NA), či jinými institucemi. Užíváme je pouze jako doplněk pamětníkova svědectví. Citované strany svazků jsou uloženy v sekci Dodatečné materiály.
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Tanto mi hermana como yo, compartíamos la lucha de mi esposo y su hermano contra el régimen. No solo porque queríamos a nuestros maridos, sino porque compartíamos ese afán de libertad.
de soltera Ileana Arango Cortina, nació el 12 de noviembre de 1937 en La Habana, República de Cuba
proviene de una familia políticamente activa bajo varios regímenes cubanos
en 1956 se casó con Ramón Puig, quien participó en la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista; después de la Revolución Cubana en 1959 incrementaron sus actividades - en contra del nuevo sistema comunista liderado por Fidel Castro
en 1960 su esposo fue sentenciado a 15 años en el presidio La Cabaña en La Habana
en abril 1961 fue ejecutado su cuñado, Manuel Puig, precisamente cuando culminaba la invasión americana en la playa Girón
el hermano de Ileana, preso político, y su hermana, viuda de Manuel Puig, emigraron a Miami, Estados Unidos de América, seguidos en 1966 por sus padres y las dos hijas de Ileana
un año después de la muerte de sus padres, en 1973, Ileana salió de Cuba para reunirse con sus hijas y su familia en Miami, su esposo, expreso político, los alcanzó cuatro años después
reside en Miami con su familia, y continúa difundiendo el testimonio del sufrimiento suyo y de sus familiares, causado por el régimen comunista en Cuba, como advertencia para las futuras generaciones
Českojazyčná verze textu následuje po španělské verzi:
“Hay que enseñar a las futuras generaciones que la falta de humanidad tiene consecuencias y que la libertad tiene su precio”, subraya Ileana Puig, esposa y hermana de presos políticos, y cuñada de un preso ejecutado. “La vida no es un regalo, la vida hay que luchar”, agrega Ileana, una mujer extremadamente valiente que, a sus 84 años sigue dando el testimonio de los que en su momento ya no pudieron darlo.
Ileana Arango Cortina, casada Ileana Puig, nació el 12 de noviembre de 1937 en La Habana, República de Cuba, dentro de una familia cohesionada y políticamente activa que sembró en ella el sentido de amor a la patria y el derecho de poder disentir, así como expresar lo que uno piensa. Ileana se acuerda de su abuelo, senador importante de los años cuarenta: “Mi abuelo decía una frase que es genial y, que todavía resuena; en el momento, cuando todos los partidos estaban en desacuerdos, decía con su voz fuerte prepotente: ‘Afuera los partidos, adentro la patria’”. En 1956 se casó con Ramón “Rino” Puig, y su hermana Ofelia con el hermano de Ramón, Manuel “Ñongo“ Puig. En seguido a su boda, en noviembre 1956[1], Ileana empezó a apoyar a su esposo Ramón, al ser integrante de las actividades de la juventud en contra la dictadura de Fulgencio Batista[2] quien gobernaba en Cuba, su intervención consistió en recaudar fondos y llevar armas a los que estaban en el frente de lucha. “El mundo empezó a tambalearse, a decir ‘hay otra cosa’. Mi mundo de ensueño, no es que haya dejado de ser un mundo de ensueño, pero fue un poco más real. Porque vi, lo que es la entrega por una causa“, comenta Ileana.
Cuando en el año 1959[3] el nuevo régimen de Fidel Castro comenzó con injustas condenas y frecuentes fusilamientos, y falta de expresión, Ileana, su esposo y toda su familia participaron en las contiendas contra el sistema comunista establecido: “Entonces tanto mi esposo como su hermano, se metieron al 100 por ciento en la lucha contra el régimen. Tanto mi hermana como yo, compartíamos esa lucha. No solo porque queríamos a nuestros maridos, sino porque compartíamos ese afán de libertad”, explica Ileana.
Un día de agosto del año 1959, durante una reunión en la casa de los padres de Ileana, su hermano no se presentó: “fue el primer preso de la familia”. El hermano de Ileana fue condenado en el juicio de la causa de conspiración trujillista-batistiana[4], organizada por el dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo, con el objetivo de derrocar el poder revolucionario en Cuba: “Fue mi primer juicio donde palpé hasta dónde se puede vivir la falta de derecho. No hubo abogado, ni testigo, la persona arrestada no tenía derecho de hablar - no había nada de esto y condenaron a mi hermano a 6 años en la cárcel La Cabaña[5]”, cita Ileana. Pronto vivió otra experiencia con el sistema judicial en Cuba. El 22 de octubre 1960 a la hora de almuerzo se despidió de su esposo, sin saber que durante los próximos 15 años lo iba a ver solamente tras las rejas. Ramón Puig fue sentenciado a privación de la libertad en la cárcel La Cabaña. Al mismo momento a la casa de Ileana entró la “G2”[6] [Dirección de Inteligencia, DI, o G2, anteriormente conocida como Dirección General de Inteligencia o DGI], Ileana los tuvo que dejar pasar, pero intentó amenazarlos: “Cuando entraron a cuarto de mis hijas, les dije: ‘Me tienen que matar antes de despertar a mis hijas’. Por primera vez me transformé de una muchacha tranquila y dulce en una fiera”, comenta al respeto.
Después del encarcelamiento del hermano y esposo de Ileana, su cuñado, Manuel Puig, decidió participar en el entrenamiento en el extranjero, para regresar a Cuba como infiltrado el 19 de marzo de 1961. Dolorosamente por falta de coordinación, el plan no tuvo éxito y Manuel fue arrestado. Enseguida la “G2” entró a la casa de su hermana, arrestándola y condenándole a 30 años de prisión. Los padres de Ileana enfrentaron una situación complicada y deplorable, cuando su hija, hijo y dos yernos aparecieron en la cárcel al mismo tiempo. El 19 de abril 1961, precisamente cuando culminaba la invasión americana en playa Girón[7], condenaron a Manuel Puig a muerte, lo que causó inmensa devastación en toda la familia, más aún en su esposa Ofelia, hermana de Ileana con sus cuatro hijos pequeños, lo que Ileana recuerda así: “Dije a mi padre: Papá, si juzgan a Manuel en estos días, lo van a fusilar’, y así pasó. El ambiente era afectado por la invasión, se sentía el odio hacia todo lo que no era Revolución”. Las últimas palabras de Manuel hacia Ofelia hasta el día de hoy resuenan en la memoria de Ileana: “¡Ofe, no te preocupes, porque no todos saben por qué mueren, pero yo sé porque me muero, éstate tranquila”! Igualmente recuerda haber visto por primera vez llorar a su padre, cuando le avisaba a la madre de Manuel, ya que era su abogado en el juicio: “No pude salvarle la vida a tu hijo, lo fusilaron”.
A Ofelia, hermana de Ileana, afortunadamente le eximieron la sentencia de 30 años. Ofelia, inmediatamente, emigró con sus cuatro hijos a Miami, EEUU, mientras que el esposo de Ileana continuaba preso. Sus hijas no se perdieron ni una sola visita en La Cabaña, ni en la Isla de Pinos. “Decía a mis dos hijas, que papi estaba en el colegio, en el principio no quería decirles que está encarcelado, hasta que una de mis hijas quiso ser pionera. Le expliqué todo lo que representa su pañoleta, ya nunca más deseaba ser pionera”, describe Ileana. “Yo no puedo permitir que mis hijas crezcan con miedo. Tienen que crecer con la libertad de escoger su futuro, no que nadie se la imponga”, aclara Ileana. Día a día se sentía la carencia, la presión y el miedo en la sociedad, por lo que Ileana consideró emigrar cuando Fidel Castro anunció: “Quién quiere, puede irse”, recuerda. Sin embargo, no deseó abandonar a su esposo, preso político, algo que significaría su muerte, debido a que los presos vivían de sustento alimenticio proporcionado por sus familiares. Los padres de Ileana la condicionaron que o se iba con su hermana a los EEUU, o ellos se iban: “Entonces salieron el 22 de octubre de 1966 a España y de ahí a Miami. Nunca volví a ver mis padres”, lamenta Ileana. Ileana se quedó en Cuba, sus hijas en exilio. Sus padres murieron en 1972. Fue durante este periodo que Ileana laboró en el sector agrícola, lo que era obligatorio para evitar la prohibición de salir del país en un futuro. Ileana llegó a Miami el 7 de febrero 1973, dos días antes de que su hija mayor cumpliera 15 años, después de siete años de separación.
“Había dejado a mi marido, para encontrarme con la realidad de la muerte de mis padres y, ver a mis dos hijas que no me conocían”, sintetiza ese momento en su vida y, a esto suma los veredictos de la gente en Cuba, donde frecuentemente escuchaba: “¿Qué tipo de mujer eres tú que abandonas a tu esposo”? “¿Qué tipo de madre eres tú si dejaste a tus hijos”? o “Te tienes que divorciar para poder salir del país”. “El tiempo todo lo puede, pude rehacer la vida con mis hijas y prepararlas para cuando llegara su padre, lo conocían de todas las visitas cuando eran pequeñas y aparte les escribía cuándo podía. Ramón nos alcanzó hasta que nuestra hija mayor cumplió 19 años”, narra Ileana.
En EEUU Ileana intentó proteger a sus hijas, por lo cual no hablaba mucho sobre el presidio en Cuba ni sobre la política opositora, hasta que al transcurrir los años surgieron conversaciones sobre estos temas e Ileana auto reflexionó: “¿Hasta qué punto nuestros hijos fueron heridos o llevan esto dentro? ¿Preguntarán porqué sus padres prefirieron una lucha sobre ellos mismos? Lo hemos hablado muchas mujeres de presos políticos, las que tuvimos que mandar nuestros hijos al extranjero antes que ir nosotras… No lamentamos nada”, subraya. Ileana menciona que todavía se refleja mucha dureza dentro de ella, aunque no siempre se sentía fuerte: “Cuando me tocan ciertos temas, se me revuelve toda una vida de dolor y sufrimiento, pero el Señor me estaba dando fuerza en cada momento”, acota.
Pese a todas las vicisitudes en la vida de Ileana, ella no lamenta absolutamente de nada, está determinada a proseguir la batalla contra el régimen comunista cubano desde Miami, proporcionando el cambio político de régimen en Cuba y, sobre todo, compartiendo la historia de su familia. Su esposo Ramón Puig es el gran bastión de Ileana, subraya que la cohesión del núcleo familiar, pese a todas las adversidades surcadas se debe al entendimiento, al convivir emociones y concordar en ideología, la causa de ambos siempre fue la misma - por la patria y por el futuro de sus hijas. “Lo que quiero es justicia. Perdonar no me devuelve nada”, aclama Ileana. “Para conseguir tu derecho, para tener tu propia mentalidad, hay que poner un pie adelante y luchar por eso”, concluye su testimonio.
[1] El 30 de noviembre de 1956 se produjo en Santiago de Cuba un levantamiento armado que tenía como propósito principal apoyar el desembarco del yate Granma de Fidel Castro que venía de México con una expedición para comenzar una insurrección armada contra la dictadura batistiana. Más información aquí: https://www.ecured.cu/Alzamiento_del_30_de_noviembre
[2] Fulgencio Batista Zaldívar fue un militar y dictador cubano. Fue el presidente constitucional de Cuba de 1940 a 1944 y dictador de facto de 1952 a 1959, año en que fue derrocado durante la Revolución Cubana. Más información aquí: https://www.ecured.cu/Fulgencio_Batista
[3] La Revolución Cubana surgió en los años cincuenta y significó derrota del Gobierno de Fulgencio Batista y comienzo del Gobierno comunista de Fidel Castro el 1 de enero 1959. Más información aquí: https://mihistoriauniversal.com/edad-contemporanea/revolucion-cubana/
[4] https://www.ecured.cu/Conspiraci%C3%B3n_trujillista_(1959)
[5] Fortaleza San Carlos de la Cabaña en La Habana sirvió después de la Revolución en 1959 como una prisión militar. Más información: https://www.ecured.cu/San_Carlos_de_La_Caba%C3%B1a
[6] Departamento de Información G-2 MINFAR fue establecido el seis de junio de 1961. El Consejo de ministros del Gobierno Revolucionario promulgó la Ley 940, que constituyó el Ministerio del Interior. Aquel G-2 MINFAR pasó al MININT, con la nomenclatura de Departamento de Seguridad del Estado (DSE), hasta hoy.
[7] Invasión en la playa Girón (15 – 19 de abril de 1961) fue una operación militar en la que tropas de cubanos exiliados, apoyados por el gobierno de Estados Unidos, invadieron Cuba en abril de 1961, para intentar crear una cabeza de playa, formar un gobierno provisional que reemplazara al de Fidel Castro. Más información aquí: https://www.telesurtv.net/news/como-invasion-playa-giron-cambio-historia-cuba-20180417-0054.html
Česká verze:
„Budoucí generace se musí naučit, že nedostatek lidskosti má následky, a že svoboda má svou cenu,“ zdůrazňuje Ileana Puig, manželka a sestra politických vězňů a také švagrová popraveného vězně. „Život není dar, se životem se musíš prát,“ dodává Ileana, mimořádně statečná žena, která ve svých 94 letech nadále vydává svědectví těch, kteří ho již dát nemohou.
Ileana Arango Cortina, provdaná jako Ileana Puig, se narodila 12. října 1937 v Havaně na Kubě do soudržné a politicky aktivní rodiny, která v ní zasela smysl pro lásku k zemi, pro právo nesouhlasit a možnost vyjádřit svůj názor. Ileana si vzpomíná na svého dědečka, významného senátora 40. let 20. století. „Můj dědeček říkával jednu frázi, která je úžasná a která stále rezonuje. Ve chvíli, kdy se žádná ze stran nemohla shodnout, řekl silným mocným hlasem: ‚Pryč s hrátky, zpátky k vlasti‘. V roce 1956 se provdala za Ramóna „Rino“ Puiga a její sestra Ofelia za Ramónova bratra Manuela „Ñongo“ Puiga. Hned po svatbě v listopadu 1956[1] začala Ileana podporovat svého manžela Ramóna v zapojení se do mládežnických aktivit proti diktatuře Fulgencia Batisty[2], který na Kubě vládl. Jeho zapojení spočívalo v získávání finančních prostředků a přinášení zbraní těm, kteří byli v první linii boje. „Svět se začal hroutit, můžeme říct, ‚bylo tu něco víc‘. Můj snový svět, ne že by už nebyl mým snovým světem, ale byl o něco skutečnější. Protože jsem viděla, co znamená obětovat se pro věc,“ vysvětluje Ileana.
Když v roce 1959[3] začal nový režim Fidela Castra s protizákonnými tresty, častými popravami a nedostatkem svobodného projevu, Ileana se i se svým manželem a celou rodinou zapojila do bojů proti nastolenému komunistickému systému. „Můj manžel i jeho bratr se na 100 % zapojili do boje proti režimu. Se sestrou jsme tento boj mého manžela a jeho bratra sdílely. Nejen proto, že jsme své manžely milovaly, ale taky proto, že jsme sdílely touhu po svobodě,“ dodává Ileana hrdě.
Jednoho srpnového dne v roce 1959 se Ileanin bratr nedostavil na rodinné setkání v domě jejich rodičů: byl prvním vězněm v rodině. Byl odsouzen v procesu konspiračního případu Trujillo-Batista[4], který organizoval dominikánský diktátor Rafael Leónicas Trujillo s cílem svrhnout revoluční moc na Kubě. „Byl to můj první proces, kde jsem pocítila, kam až může zajít nedostatek práva. Nebylo žádného právníka, žádného svědka, zatčený neměl právo mluvit – nic z toho nebylo a mého bratra poslali na 6 let do vězení La Cabaña[5],“ vzpomíná Ileana rozhořčeně. Brzy se soudním systémem na Kubě získala další zkušenost. Dne 22. října 1960 se v době oběda rozloučila se svým manželem, aniž by věděla, že ho dalších 15 let uvidí pouze skrze mříže. Ramón Puig byl odsouzen k odnětí svobody ve věznici La Cabaña. Ve stejnou dobu vnikla do Ileanina domu „G2“[6]. Ileana je musela nechat vstoupit, ale zkusila jim alespoň vyhrožovat. „Když vstoupili do pokoje mých dcer, řekla jsem jim: ‚Budete mě muset zabít, než abyste vzbudili moje dcery‘. Poprvé jsem se z klidné a milé dívky proměnila v bestii,“ vzpomíná na onu osudnou noc.
Po uvěznění Ileanina bratra a manžela se její švagr Manuel Puig rozhodl zúčastnit školení v zahraničí, aby se dne 19. března 1961 vrátil na Kubu jako infiltrátor. Kvůli nedostatečné koordinaci byl bohužel plán neúspěšný a Manuel byl zatčen. G2 okamžitě vtrhla do domu Ileaniny sestry, zatkla ji a odsoudila k 30 letům vězení. Ileaniny rodiče čelili složité a žalostné situaci, kdy se jejich dcera, syn a dva zeťové ocitli ve stejnou dobu ve vězení. Dne 19. dubna, přesně v momentě, kdy vrcholila americká invaze v zátoce Sviní[7], byl Manuel odsouzen k smrti, což vedlo ke zničení celé rodiny a ještě více Manuelovi manželky Ofelie, Ileaniny sestry, a jejích čtyřech malých dětí. Na tuto dobu nevzpomíná Ileana lehko. „Řekla jsem otci: ‚Tati, pokud Manuela soudí v těchto dnech, zastřelí ho‘, a to se taky stalo. Atmosféra byla ovlivněna invazí, byla cítit nenávist vůči všemu, co nesouviselo s Revolucí,“ vysvětluje Ileana přísnost a rychlost soudního rozhodnutí. Poslední Manuelova slova Ofelii má Ileana dodnes v paměti: „Ofe, neboj se, protože ne všichni vědí, proč umírají, ale já vím, proč umírám, buď klidná!“ Pamatuje si také, že poprvé viděla plakat svého otce, když navštívil Manuelovu matku, jelikož byl u soudu jeho právníkem. „Nemohl jsem tvému synovi zachránit život, popravili ho,“ řekl jí.
Ofelia, Ileanina sestra, měla štěstí a byla od 30letého trestu osvobozena. Ihned poté se svými čtyřmi dětmi emigrovala do amerického Miami, zatímco Ileanin manžel zůstával ve vězení. Jejich dcery nevynechaly jeho jedinou návštěvu ve věznici La Cabaña ani v Isla de Pinos. „Svým dvěma dcerám jsem říkala, že táta je ve škole, nejdříve jsem jim nechtěla říct, že je ve vězení, dokud jedna z mých dcer nechtěla být pionýrkou. Vysvětlila jsem jí, co její šátek představuje, už nikdy být pionýrkou nechtěla,“ popisuje Ileana. „Nemohu dovolit, aby moje dcery vyrůstaly ve strachu. Musí vyrůst ve svobodě zvolit si svou budoucnost, ne aby jim ji někdo vnucoval,“ začíná Ileana mluvit o důvodech k odchodu z Kuby. Ve společnosti byl dnem za dnem cítit nedostatek, tlak a strach, a tak když Fidel castro oznámil „Kdo chce, může jít“, začala Ileana emigraci zvažovat. Nechtěla však opustit svého manžela, politického vězně. Znamenalo by to jeho smrt, protože vězni žili z jídla od příbuzných. Její rodiče jí dali podmínku, že do USA buď odejde ona se svou sestrou, nebo oni. „A tak odešli 22. října 1966 do Španělska a odtud do Miami. Už nikdy jsem své rodiče neviděla,“ vzpomíná smutně. Ileana zůstala na Kubě a její dcery odešly do exilu. Rodiče jí zemřeli v roce 1972. V té době pracovala v zemědělství, což bylo nezbytné k tom, aby do budoucna předešla zákazu opuštění země. Ileana přiletěla do Miami 7. února 1973, dva dny předtím, než její starší dceři bylo 15 let, po sedmi letech odloučení.
„Opustila jsem svého muže, abych se vyrovnala s realitou smrti mých rodičů a viděla své dvě dcery, které mě neznaly,“ shrnuje složité momenty svého života. Jedním dechem dodává verdikty lidí na Kubě, kde často slýchala: „Co jsi to za ženu, že opouštíš svého manžela?“ „Co jsi to za matku, že jsi opustila své děti?“ nebo „Musíš se rozvést, abys mohla opustit zemi“. „Čas všechno zmůže, může znovu budovat život s mými dcerami a připravit je na to, až přijede jejich otec, znaly ho ze všech těch návštěv, když byly malé, a kromě toho jim psal, kdykoliv mohl. Ramón se k nám přidal, když bylo naší starší dceři 19 let,“ vzpomíná Ileana.
V USA se Ileana snažila své dcery chránit, a proto jim o kubánském vězení, ani o opoziční politice příliš neříkala. Jak roky plynuly, začaly se rozhovory na toto téma objevovat a Ileana začala automaticky reflektovat. „Do jaké míry byly naše děti zraněny nebo si to vše v sobě nesou? Budou se ptát, proč jejich rodiče dali přednost boji před nimi samými? Mluvilo o tom mnoho žen politických vězňů, ty z nás, které musely poslat své děti do zahraničí, než jsme samy odešly… Ničeho nelitujeme,“ zdůrazňuje Ileana. I dnes tvrdí, že se v ní nadále odráží zatvrzení, ačkoliv ne vždy se cítila silná. „Když se mě určitá témata dotýkají, vrátí se mi celý bolestivý život a utrpení, ale Pánbůh mi ve vždy dával sílu,“ dodává pokorně.
Navzdory všem životním peripetiím Ileana vůbec ničeho nelituje, je odhodlaná pokračovat v boji proti kubánskému komunistickému režimu z Miami, pomoci zajišťovat politickou změnu kubánského režimu a především sdílet rodinou historii. Její manžel Ramón Puig je její velkou oporou. Ileana zdůrazňuje, že soudržnost nejbližší rodiny je navzdory všem protivenstvím dána porozuměním, sdílením emocí a ideologickou shodou. Pro oba byl důvod boje vždy jasný – pro zemi a budoucnost svých dcer. „To, co chci, je spravedlnost. Odpuštění mi nic nenavrátí,“ zdůrazňuje Ileana. „K získání svého práva na svůj vlastní způsob myšlení je potřeba udělat krok vpřed a bojovat za něj,“ uzavírá své svědectví.
[1] Dne 30. listopadu 1956 došlo v Santiago de Cuba k ozbrojenému povstání, jehož hlavním cílem bylo dopomoci vylodění jachty Granma Fidela Castra, které připlula z Mexika s výpravou k zahájení ozbrojeného povstání proti Batistově diktatuře. Více na: https://www.ecured.cu/Alzamiento_del_30_de_noviembre
[2] Fulgencio Batista Zaldívar byl kubánský voják a diktátor. Byl prezidentem Kuby v letech 1940 až 1944 a de facto diktátorem od roku 1952 až do roku 1959, kdy byl během Kubánské revoluce svržen. Více na: https://www.ecured.cu/Fulgencio_Batista
[3] Kubánská revoluce vypukla v 50. letech 20. století a znamenala porážku vlády Fulgencia Batisty a dne 1. ledna 1959 začátek komunistické vlády Fidela Castra. Více na: https://mihistoriauniversal.com/edad-contemporanea/revolucion-cubana/
[4] Více o případu na: https://www.ecured.cu/Conspiraci%C3%B3n_trujillista_(1959).
[5] Pevnost San Carlos de la Cabaña v Havaně sloužila po revoluci v roce 1959 jako vojenská věznice. Více na: https://www.ecured.cu/San_Carlos_de_La_Caba%C3%B1a
[6]G2 neboli Dirección de Inteligencia, DI, česky Ředitelství rozvědky, dříve známé jako Dirección General de Inteligencia, česky Vrchní ředitelství rozvědky.
[7] Invaze v zátoce Sviní (Invasión en la playa Girón) ve dnech 15. - 19. dubna 1961 byla vojenská operace, při které kubánské exilové jednotky podporované vládou USA napadly Kubu s cílem vytvořit spojnici s pláží a nastolit provizorní vládu, která nahradí Fidela Castra. Více na: https://www.telesurtv.net/news/como-invasion-playa-giron-cambio-historia-cuba-20180417-0054.html
© Všechna práva vycházejí z práv projektu: Paměť kubánského národa – nástroj pro transformaci kubánské společnosti ke skutečné svobodě
Příbeh pamětníka v rámci projektu Paměť kubánského národa – nástroj pro transformaci kubánské společnosti ke skutečné svobodě (Iva Fričová)